El ciclo nasal, que consiste en la alternancia entre la congestión y la descongestión nasal, es esencial para nuestra respiración. A menudo se piensa que el aire se distribuye uniformemente entre ambas fosas nasales durante la inhalación, pero esto no es correcto. El ciclo nasal, también conocido como ciclo de congestión y descongestión nasal, regula el intercambio de aire al permitir que las fosas nasales se alternen en la expulsión del aire.
Cuando hablamos de ciclo nasal, nos referimos a esa sensación de tener la nariz congestionada en ciertos momentos y descongestionada en otros. Esto se debe a la alternancia de fases de los plexos cavernosos de la cavidad nasal, que generalmente ocurre casa 4 a 8 horas. Dependiendo de la fase en la que nos encontremos, congestión o descongestión, una de las fosas nasales se siente bloqueada, dificultando la respiración, mientras que la otra permite respirar con mayor facilidad. Con el tiempo, se produce el cambio de fase y la vía nasal previamente congestionada se descongestiona, mientras que la otra se bloquea.
¿Para qué sirve el ciclo nasal?
El ciclo nasal sirve para dar un descanso. Mientras una fosa nasal está funcionando con normalidad, la otra se está recuperando de las sustancias contaminantes que pueden llegar a irritar y resecar a la nariz durante el paso de aire por los conductos nasales. Cuando ocurre el ciclo nasal, se puede llegar a expulsar hasta un 75% del aire y posteriormente, el restante. Este proceso, si coincide con una fase de congestión nasal, puede dificultar la respiración y provocar molestos síntomas como dolores de cabeza, afectar al sueño y, por lo tanto, reducir tu rendimiento en tus actividades diarias.
¿Cómo afecta la congestión por resfriado durante el ciclo nasal?
Es posible que el ciclo nasal se vea afectado cuando presentamos una congestión nasal, por lo tanto, es importante tener en cuenta que este proceso puede volverse insoportable e incómodo, debido a la congestión en las aperturas nasales obstruidas.
Básicamente, la sensación de taponamiento se ve aumentada generando irritabilidad e incomodidad. Las alergias estacionales, las condiciones ambientales o la exposición a alérgenos o sustancias irritantes como el polen o los ácaros del polvo pueden desencadenar en una congestión mayor del ciclo nasal. A su vez, la postura en la que dormimos de noche acentúa la congestión nasal y no ayuda al drenaje de la mucosidad.
Alivio para la congestión en el ciclo nasal
Existen diferentes opciones para hacer frente a la congestión del ciclo nasal, las cuales permiten reducir el impacto negativo de dicho taponamiento. Los sprays nasales de Afrin® son una opción ideal para tratar la congestión nasal y abrir las vías nasales cuando coincide con el ciclo nasal
Sus diferentes versiones, como Afrin® No Drip CSE recomendado para congestión severa, o Afrin® Adulto, consiguen reducir la inflamación, brindando alivio hasta por 12 horas. Otras opciones para abrir las vías nasales como el uso de humidificadores, mantener una buena higiene y realizar una limpieza nasal con soluciones salinas pueden ayudar a reducir la congestión del ciclo nasal gracias a su composición con oximetazolina y tecnología que no escurre por la nariz tras su aplicación.
La siguiente vez que percibas que solo respiras por una de las fosas nasales, recuerda que es un proceso natural donde las vías nasales están turnándose para poder descansar y que los orificios no se resequen. Si te incomoda en exceso y empeora tu calidad de vida, prueba con algún producto para la descongestión nasal y, si la situación no mejora, no dudes en acudir con un especialista para que te brinde un diagnóstico preciso.